Los cambios en las pautas de compra de los consumidores y las nuevas tecnologías impulsan este crecimiento. Ahora el producto debe llegar al consumidor, mientras que antes el consumidor tenía que llegar al producto.
El auge del comercio electrónico
Según el informe “Las cifras clave del E-commerce” de Statista, antes de la pandemia, las ventas en comercio electrónico se estimaban en 3,351 mil millones de dólares (2019); esta cifra aumentó significativamente, y para 2023 ya había alcanzado los 5,784 mil millones de dólares, representando un incremento del 72.6% en los últimos cuatro años. Las proyecciones indican un crecimiento del 39% de esta cifra en los próximos años, con expectativas de superar los ocho billones de dólares en 2027.
Entre los países líderes en comercio electrónico se encuentra China, donde casi el 50% de sus ventas minoristas constituyen transacciones en línea. Indonesia, en segundo lugar, alcanzó el 32%, seguida del Reino Unido y Corea del Sur, que superaron la barrera del 30%. Según estimaciones de Statista Digital Market Insights, el mercado del comercio electrónico de América Latina y el Caribe superó un valor de ventas minoristas de 117 mil millones de dólares durante 2023.
Cada vez más consumidores se inclinan por las compras en línea debido a diferentes factores como precios más bajos, mejores descuentos, ofertas y productos exclusivos, y también el factor de comodidad de comprar desde casa y recibir los productos directamente en su puerta. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo, los consumidores también se vuelven más exigentes, ya que esperan recibir sus compras más rápido, hasta el punto de que algunos marketplaces realizan entregas el mismo día en Estados Unidos. En el Reino Unido, se han llevado a cabo algunos experimentos para realizar la entrega tan sólo 30 minutos después de finalizar la compra, lo que supone una mayor presión para el sector logístico a la hora de llevar a cabo esta difícil tarea.
Cadena de suministro vs Nearshoring
Una importante tendencia que también es impulsada por el crecimiento del e-commerce es el nearshoring. El crecimiento de este movimiento surge de la necesidad de las empresas de situar cadenas de suministro más cerca de sus clientes principales. En lugar de fabricar y enviar productos desde un país hacia el otro lado del mundo, las empresas están empezando a producir y enviar desde ubicaciones más estratégicas y cercanas a sus clientes.
Se espera que este cambio haga que dichas regiones cercanas, como México, crezcan más deprisa, ya que las empresas reducen el plazo de entrega al estar más cerca, disminuyen los impedimentos para hacer llegar los productos a los clientes, y satisfacen mejor sus necesidades.
"El cambio al nearshoring, sin embargo, exigirá a las empresas una gestión más cercana de su logística, y un mayor control de toda su cadena de suministro. Cuanto menor sea el plazo de entrega, menor tiempo de reacción tendrá una empresa. No se trata sólo de visibilidad, sino también de capacidad de reacción cuando algo sale mal", afirma Mario Veraldo, CEO de MTM Logix.
Esto impulsa el crecimiento de mercado en la gestión de las cadenas de suministro, que además crecerá a un ritmo anual del 10.9% en los próximos ocho años. El auge de las soluciones integrales de gestión en las cadenas de suministro responde a la necesidad de un control y una reacción mucho más estrictos.
La gestión en la cadena de suministro es una industria altamente especializada que carece de normas y de gestión de procesos por parte de las empresas, tiene una baja adopción de tecnología, y se enfrenta actualmente a muchas adversidades circunstanciales, como los ataques de rebeldes en el Mar Rojo contra buques comerciales, que aumentan la complejidad y perjudican a las empresas de todo el mundo.
"En los últimos 20 años hemos visto el aumento de la visibilidad en envíos de todos los tamaños, pero la mayoría de las empresas -grandes y pequeñas- siguen gestionando sus operaciones con hojas de cálculo en Excel. Al mejorar el control y la reacción, una empresa puede reducir inventario, los residuos de producción y, por último, repercutir considerablemente en su huella de carbono. Como los consumidores quieren comodidad, las empresas tendrán que trasladar esa comodidad a sus propias operaciones", añade Veraldo. "La correcta gestión de la logística sólo puede venir de la mano de una correcta colaboración, las empresas deben buscar un proveedor que conozca todo el panorama, que utilice sus datos y la tecnología en su favor y que sepa prever cualquier tipo de evento, esto es lo que mejor sabemos hacer", concluye el directivo.
Redacción C21