Los participantes de la mesa de discusión, conformada por Raymundo César Martínez Garcia, presidente del Colegio Mexiquense; Arlette Covarrubias Feregrino, investigadora del Colegio Mexiquense; Alma P. de León Calderón, investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana-Lerma; Víctor G. Carreón Rodríguez, investigador del Centro de Investigaciones y Docencia Económicas, y Miguel Guajardo Mendoza investigador del Colegio Mexiquense, desentrañaron la necesidad de acelerar la revolución tecnológica del sector financiero, y de eliminar barreras regulatorias para alcanzar el máximo potencial de la innovación.
La doctora Covarrubias señaló que el libro se divide en tres partes. La primera es un análisis de la estructura vigente del sistema financiero mexicano, que considera a los oferentes, reguladores y a las leyes que establecen las reglas del juego, así como algunos sesgos en contra de las mujeres y de los habitantes de localidades pequeñas. La segunda reflexiona sobre las alternativas que plantean las nuevas tecnologías para ofrecer productos cada vez más cercanos a las necesidades de los demandantes. Finalmente, en la tercera parte, se discuten las barreras a la entrada y las barreras a la operación de las instituciones digitales financieras, y se plantea una hoja de ruta para acelerar la inclusión financiera a través de la digitalización del sector.
Por su parte, la doctora De León remarcó las consecuencias negativas del sesgo en contra de las mujeres en el mercado de ahorro señalando que esto les impide planear su decisiones de consumo futuro pues no cuentan con instrumentos disponibles para colocar recursos presentes para utilizarlos más adelante. Además, el sesgo en contra de los habitantes de localidades pequeñas en el mercado de crédito los excluye de opciones para financiar hoy la adquisiciones de bienes que podrían pagar en el futuro. Afortunadamente, la digitalización del sector, surge como una importante oportunidad para cerrar esta brecha, fomentando la adopción de tecnología entre los participantes actuales del sistema financiero y facilitando la entrada de nuevos actores disruptivos, como los neobancos o las plataformas de múltiples productos.
Finalmente, el doctor Carreón hizo un llamado a los reguladores a facilitar la innovación y la incorporación de actores disruptivos, quienes poseen la capacidad y las tecnologías necesarias para impulsar la inclusión financiera en nuestro país. Mencionó que de no hacerlo, el país se verá superado por países que han sido propositivos en sus esquemas de regulación pro-competitivos, como Brasil y Uruguay. Mencionó que el objetivo debe ser el diseño de un marco regulatorio que ponga en el centro el bienestar de las personas sin inhibir los incentivos a la innovación.
Esta colección de ensayos propone a reguladores, directivos de empresas de tecnología financiera y académicos especializados en la materia, medidas provocativas y urgentes, como facilitar la entrada de nuevos bancos digitales o acelerar la adopción de pagos digitales, con el fin de amplificar los beneficios de la disrupción tecnológica entre segmentos de la población que han permanecido excluidos sin acceso a servicios financieros.
Redacción C21